¿Estás buscando coche y no sabes ni por dónde empezar? No te preocupes, es algo normal. En nuestra base de datos tenemos listados más de 500 modelos, baratos, caros, grandes y pequeños, deportivos, modestos. En fin, para cada categoría existen decenas de alternativas, e incluso en una misma marca, es fácil que encuentres tres o cuatro coches que bien podrían adecuarse a tu presupuesto y cubrir tus necesidades. Pero el problema es que solo puedes elegir uno, ¿cuál será tu compra inteligente?

En ¿Qué coche me compro? te ofrecemos un formulario muy sencillo para facilitar tu elección, para que conozcas en un primer vistazo las alternativas que tienes. En cualquier caso, la presente guía pretende ayudarte en el complejo proceso de decisión de compra.

 

Lo primero y más importante: el presupuesto

Para decidir la compra de cualquier producto de consumo de cierto valor, sea o no un coche, siempre hay que tener claro un presupuesto máximo y tratar de no superarlo. Sabemos que es tentador dejarse engañar por la financiación, por pagos en cómodos plazos, y optar a un coche más caro del que inicialmente queríamos comprar. Pero hay que tener en cuenta que la financiación lleva aparejada habitualmente otros gastos (comisiones) que harán que las cuotas crezcan y que la cantidad efectiva que paguemos sea muy superior a la de nuestro presupuesto inicial.

Por lo tanto, asegúrate de tener claro un presupuesto máximo y, en el caso de financiar, asegúrate también de poder hacer frente a las cuotas mensuales y a las cantidades de apertura y cierre del préstamo. Nunca establezcas un presupuesto por encima de tus posibilidades.

Y en el caso de que tu presupuesto no sea suficiente para encontrar un coche que cubra tus necesidades, plantéate la posibilidad de comprar un coche de segunda mano. Te lo contamos en la siguiente guía: ¿es mejor comprar un coche nuevo o de segunda mano?

 

Ten claras tus necesidades y realiza descartes

Nunca compres un coche que no vaya a cubrir tus necesidades. Si viajas habitualmente con toda la familia, no renuncies a un maletero amplio. Y es que, por muy idílica que parezca hoy en día aquella imagen de los españoles viajando a Benidorm en los años 60 con toda la familia - suegra incluida - en un Seat 600, te arrepentirás de no haber comprado un coche más espacioso cuando compruebes que no puedes llevar todo tu equipaje.

 

  • Voy a realizar muchos kilómetros, mínimo 30.000 o 40.000 kilómetros al año: La compra inteligente tal vez es un diésel, y si vas a viajar por carretera, una berlina será la opción más apropiada. 
  • Voy a hacer pocos kilómetros y habitualmente en ciudad, menos de 15.000 al año: Huye del diésel. Generalmente, no lo amortizarás hasta que pasen unos cuantos años y los diésel modernos - por sus sistemas anticontaminación - suelen ser muy propensos a dar problemas en esas condiciones. Te recomiendo este artículo de Diariomotor: ¿Cuándo el diésel se convirtió en la elección más absurda?
  • Utilizaré habitualmente las plazas traseras, por ejemplo para llevar a los niños al colegio: Quizás debas descartar, por lo incómodo de abatir asientos, coches con menos de cuatro puertas.

  • Necesito un maletero amplio, para viajar con niños pequeños o con toda la familia: Los monovolúmenes son una buena alternativa, además económica, pero no la única. Los SUV se han convertido en la alternativa más popular, pero generalmente no son tan económicos. Por último, también existen familiares de tipo ranchera, muy polivalentes y a menudo con un maletero mayor que todos los anteriores.
  • Somos familia numerosa: No lo dudes, necesitas un siete plazas y a ser posible de tamaño grande. Si tienes que utilizar habitualmente la sexta y la séptima plaza, busca un coche que tenga una tercera fila de asientos apta para su uso continuado y además un maletero amplio. No todos los monovolúmenes gozan de una tercera fila de asientos holgada, por ejemplo para un niño de más de diez años.
  • No necesito un gran maletero, pero sí un coche ágil en ciudad: No te dejes llevar entonces por la máxima de coche grande, ande o no ande. Actualmente hay utilitarios pequeños, del segmento A - tipo Renault Twingo - y del segmento B - tipo Ford Fiesta - realmente cómodos y equipados con tecnología y elementos de confort similares a los de modelos superiores.

  • Quiero salir al campo con mi coche: No lo dudes, el SUV es tu mejor opción. Los SUV modernos no cuentan con la capacidad fuera de pista de un buen todoterreno, pero sí cumplen en la mayoría de las situaciones que te encontrarás circulando por caminos y pistas complicadas. Si quieres un maletero muy espacioso y un coche ágil en carretera, quizás también debas plantearte un familiar "campero" - como por ejemplo el Volkswagen Passat Alltrack.
  • Me gusta la velocidad, quiero un coche potente: La oferta de coches divertidos es realmente extensa, desde los más pequeños y económicos - tipo Ford Fiesta ST - hasta los más potentes y caros - como el Porsche Boxster. Para gozar de un buen deportivo, no siempre tendrás que irte a una marca premium, ni a un tracción trasera, ni a un coche muy potente. Hay opciones divertidas y muy económicas, por no hablar del mercado de ocasión. Tampoco te olvides de que los deportivos más caros y potentes también suelen llevar aparejado un elevado coste de mantenimiento y repostaje.

  • No me gusta correr y viajo siempre a velocidades legales: No te dejes engañar, si no necesitas un coche potente, no compres un coche potente. En la actualidad todos los coches, hasta los más baratos,  pueden realizar viajes largos por carretera tranquilamente también para efectuar incorporaciones y adelantamientos con seguridad. Además, al ser menos potentes, ahorrarás mucho dinero tanto en el precio de compra como en el posterior mantenimiento. 
  • Me gusta disfrutar al aire libre, quiero un cabrio, ¿qué descapotable elijo? Los descapotables modernos han mejorado mucho respecto a antaño, con sistemas de apertura y cierre automático más rápidos, menos problemas de estanqueidad (sin fugas que permitan al agua de la lluvia entrar en el habitáculo) y más seguros ante el vandalismo y los robos. Puedes elegir descapotables con techo de lona, el estilo más clásico, o con techo rígido, estilo coupé. Pero lo mejor es que te leas nuestra guía con 5 ventajas y 5 inconvenientes de comprarse un descapotable.