Opiniones Mazda MX-5

El Mazda MX-5 me ha parecido el coche más deportivo, más pasional, que podemos encontrar en el mercado por su precio. Si tuviera que quedarme con una conclusión de mi experiencia en el Mazda MX-5 esa sería la de haber constatado lo divertido que puede ser un coche sin necesidad de ser muy potente.

Lo que más me gusta del Mazda MX-5 es su tacto de conducción, la sensación de estar al volante de un kart grande. Su puesto de conducción es bajo, deportivo, pero todo lo confortable que puede resultar un coche de estas características. Sin necesidad de ser muy potente, el Mazda MX-5 es un coche muy deportivo y divertido, que transmite mucho sin ningún exceso de potencia, y sin necesidad de circular muy rápido. En cualquier caso, recomendaría el motor 2.0 SKYACTIV-G de 184 CV de potencia a cualquier conductor que quiera disfrutar de carreteras con muchas curvas, puesto que ese extra de potencia respecto a los 132 CV del 1.5 SKYACTIV-G marcan la diferencia.

El Mazda MX-5 también me ha transmitido sensaciones que cada vez son más difíciles de encontrar en un coche moderno, por su tacto de conducción, pero también por sus motores atmosféricos, sin turbo, que siempre invitan al conductor a estirar hasta cerca del corte y disfrutar de cada marcha, y ejecutar reducciones con punta tacón en cada giro.

También me quedaría con lo bueno que es el Mazda MX-5 como coche de diario. Dentro de su carácter deportivo no es un coche caro, ni de comprar, ni de mantener. Tampoco es un coche con unos consumos demasiado elevados. De hecho, sus consumos son muy ajustados para disponer de motor de gasolina.

David Villarreal