Desde esta semana es posible realizar las reservas de los Ford Focus RS en los concesionarios españoles. La versión más picante y radical de la oferta promete sensaciones a sus mandos aunque los interesados deberán saber que las primeras unidades no llegarán a sus manos hasta los primeros días del año que viene.
Vestido con muchos elementos que mejoran la aerodinámica y de paso añaden un toque muy agresivo, el Focus RS sólo puede pedirse con la práctica carrocería de cinco puertas. Los más despistados se darán cuenta de que no es una versión convencional por su enorme alerón, los paragolpes modificados o las generosas llantas de aleación de 19 pulgadas.
En el interior más o menos todo sigue como siempre, estrenando tapizado, asientos y poco más. La idea es hacer un coche divertido pero también cómodo para que pueda ser usado en el día a día. Los pedales deportivos, los relojes suplementarios como los del ST y los umbrales de puerta con una placa metálica son algunos de los elementos que intentan dotarle de personalidad.
La dotación de serie para España es bastante rica, incluyendo el sistema de sonido con pantalla de ocho pulgadas, bluetooth, puerto USB, control por voz, cuatro elevalunas eléctricos, espejos térmicos, faros bi-xenón, lavafaros, antinieblas, control de crucero, ordenador de viaje, múltiples airbags, ABS, EBD, TPMS, ESP, etc.
Bajo el capó el RS esconde un potente 2.3 Ecoboost que desarrolla 350 CV y con el que es capaz de alcanzar los 266 km/h de velocidad máxima y acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos. Ford dice que el consumo medio es de 7,7 L/100, con unas emisiones de 175 g/km de CO2.
En cuanto a la transmisión, la firma ha elegido una caja de cambios manual con seis velocidades que transmite la energía a las cuatro ruedas de manera inteligente, repartiendo el par de la forma más adecuada según las circunstancias. No habrá una transmisión automática ni de doble embrague, al menos por ahora.
El precio recomendado del nuevo Focus RS 2.3 Ecoboost es de 40.260 €, una tarifa bastante aceptable si tenemos en cuenta que sus principales rivales como los Audi RS3 o Mercedes-AMG A45 se quedan muy cerca de los 60.000 € y un Golf R tiene un coste similar pero siendo menos potente.
